Un día pasó por un callejón y escucho un disparo, fue corriendo para ver que pasaba. Cuando llegó vio la puerta media abierta,
entro y vio un cadáver y miro haber si estaba el asesino pero
se veía que salio corriendo. El detective encontró la pistola que
se uso al lado del cadáver.
Pregunto sobre el fallecido a los vecinos, al parecer los vecinos lo odiaban y el detective pensó que seria uno de ellos el asesino.
Busco huellas en el arma pero la habían limpiado y no encontró ni una huella. Investigo en la casa y encontró un pendiente en el suelo y solo tenia que encontrar el compañero para dar con el asesino.
Fue hacia una vecina que más tenía motivos para odiarlo y se fijo
cuando le abrió la puerta que le faltaba un pendiente y se dio cuenta que era la asesina y la encerró en la cárcel.