El amor de un detective improvisado
Un día iba caminando por la calle cuando algo cae a centímetros de mí. Cuando me doy cuenta, saco la cámara y tomo una foto. ¡Era un cadáver!
Pienso que debo investigar un poco y subo por el edificio por el que había caído el cuerpo, cuando de repente veo una puerta abierta con un hombre con la camisa manchada de sangre. Saco una foto como prueba y entonces el hombre manchado de sangre sale corriendo gritando:
-¡Corten! ¡Corten!
Me doy cuenta de que era una película. Pido disculpas y me obligan a borrar las fotos para que no sean difundidas antes del estreno. Salgo del edificio y me tropiezo al salir y me caigo. Tuve una rara sensación al levantarme. Me di la vuelta para ver con que me había tropezado y… ¡No estaba el edificio!
Una señora que estaba al lado mío muy preocupada me dijo que me había caído hacía 10 minutos y que me acababa de levantar.
Llegó la ambulancia y les conté lo que me había ocurrido, pero no me creyeron, simplemente me dijeron que sería un desvarío debido al golpe en la cabeza, pero no tenía dicho golpe. Desde ese momento supe que esa ciudad escondía algo.
-Pero, papá.
-¿Sí?
-¿Que tiene que ver esto con cómo conociste a mamá?
-Pues, hijo, la señora aquella hoy en día es tu madre.