Los autobuses no creen en Dios
Bueno, si nos remitimos para hablar de la religión a la constitución y sacamos artículos, también dice que todos los…
Me apetece hacer un pequeño comentario sobre los autobuses que estuvieron circulando por Barcelona, Madrid, Málaga y no sé si otras ciudades españolas con el lema «Probablemente Dios no existe. Deja de preocuparte y disfruta la vida«.
En primer lugar, es tanta la publicidad, directa o indirecta, de la Iglesia Católica, al más puro estilo de las marcas punteras, que ya sólo le falta al Vaticano emitir un anuncio junto a los cavas catalanes el día de fin de año. Así que un poco de publicidad, por una vez, de ideas que discuten la existencia de Dios, no le veo gravedad y sí un sano ejercicio racional.Y espiritual, no vaya a ser que ahora mi espíritu esté regulado también por la RatzingerKomitern, Papa -cargo con matices públicos y políticos- al que eligen unos señores, por lo visto, iluminados por Dios en esos instantes. Desconozco el ritual exacto pero me interesa más la idea de conexión espiritual y revelación.
Y es la reacción de Rouco Varela y la Conferencia Episcopal Española la que aún me ratifica más en la postura. Si a la Iglesia, en tanto que institución, le parece que unos autobuses con ideas diferentes a las que ellos postulan, les parece que hace peligrar el Cristianismo, no quiero pensar el día que hagan manifestaciones a favor del ateísmo o negando la existencia de Dios. Porque, hasta donde yo sé, la Constitución y las Leyes que nos rigen en este país, y aún supongo que las internacionales, no consideran delito afirmar que Dios no existe.
Lo que me parece grave es que se nos hayan adelantado unos autobuses. Yo hubiera descartado «probablemente», y hubiera dejado la afirmación rotunda, puesto que la existencia de Dios es un acto de fe, y como tal, imposible de demostrar. La ilusión, la fe, etc. son estados de las personas que pertenecen a su esfera de, por decirlo de alguna forma, la imaginación y que se hace realidad a fuerza de creer en lo que no han visto. Un ejercicio memorable y respetable, pero no olvidemos que la libertada acaba donde comienza la ajena. Pensamientos propios incluídos.
Dejemos que quien quiera creer crea, y quien no quiera creer no lo haga, pero no demonizemos a quien no cree en Dios y quien tiene una perspectiva vital suya, propia y que no interfiere con la ajena. Esto del pensamiento único me resulta cansino.
A ver cuándo vemos un par de ellos por Canarias. Vendría más que bien.
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Verás, personalmente creo que sois mucho más radicales aquellos que no creen en nada, que los que, de alguna manera, sea por creencias, por educación, por nuestro entorno, creemos en algo superior a nosotros.
Estoy de acuerdo contigo en el comentario respecto a la Iglesia, es una institución que se debería de entretener en hacer apología de su cristiandad y ayudar a los más necesitados, y menos criticar a todo lo que no sea comulgable con la idea de ellos, cuando digo «ellos» me refiero al clérigo.
Pero también es cierto, que sus creencias, de alguna manera, les lleva a defender lo que creen, y no veo que sea una imposición. Por ejemplo, hay religiones mucho más extricta en sus creencias y nadie se mete con ellas, tan sólo las respetan y punto.
Creo que todo aquel que critica a la fe católica, está como no, en su derecho…pero ¿porqué cuando visitan paises islámicos, las mujeres se tienen que poner el pañuelo en la cabeza para entrar en las sinagogas?¿porqué sus maridos, parejas, acompañantes, no se quejan de eso?…
Es muy fácil para todo españolito quejarse de las ideologías de los cristianos, sin embargo, no reparan en otras, que como digo, son mucho más radicales y que están proliferando en nuestro país.
Está claro que la libertad de cada individuo tiene que ser respetada, ni se tiene que tachar de «loco» (que no digo que tú lo hayas hecho) ni de fanáticos por creer en algo diferente a la teoría que todo lo tangible es lo correcto.
Estoy de acuerdo, la iglesia no debería de meterse en fregados ajenos o políticos, pero señores, que no se nos olvide, que éste país, por mucho que algunos se empeñen en hacernos ver lo contario, es católico.
Como aquel que no está de acuerdo con la monarquia y …..amigo, no tienes más remedio que tragar con ellos. Es lo que hay y es lo que tenemos.
Empecemos a respetar todos, las ideas de cada uno, sin ir más allá de una simple visión particular sin generalizar, porque entonces, se pierde el norte.
Cada cual es muy libre de escoger lo que desea ser en ésta vida, sin que nadie te tache con alguna palabra que puede llegar a herir (que no es mi caso)…
La constitución nos ampara a todos y es lo mejor que podemos hacer, respetar.
Un saludo.
Hola luna lunera!! 😀
Hay varios puntos de tu planteamiento en los que encuentro conflictos.
El primer punto que hay que establecer es que, como la Constitución dice en su artículo 16.3:
Ninguna confesión tendrá carácter estatal. Los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española y mantendrán las consiguientes relaciones de cooperación con la Iglesia Católica y las demás confesiones.
Es decir, que la popularidad de una religión no la hace mejor -porque en sí misma la idea sería absurda- ni deberá tener privilegios, como así dice la Constitución en este artículo, puesto que finaliza el párrafo diciendo «y las demás confesiones».
No podemos ser más radicales los que no creemos en nada puesto que, que yo sepa, la Inquisición se dedicó a torturar y asesinar a quien no creía en nada, precisamente.
La Iglesia Católica impone porque no quiere perder cotas de poder, incluso chantajeando al Estado durante la campaña electoral última, con manifestaciones y declaraciones contra el gobierno que, por cierto, le da una casilla para que los españoles que quieran den una limosna por la salvación de sus almas o bien por las actividades de caridad y atención que realiza la Iglesia Católica en España, tanto me da como me da tanto.
Las mujeres islámicas que se ponen pañuelos viven en OTRA cultura, y cómo vamos nosotros a interferir en OTRA cultura y en la forma de vivir de OTRAS personas. Entonces, estaríamos diciendo que la nuestra es la MEJOR, simplemente porque es la que nos gusta y es en la que vivimos. Es evidente que el papel de la mujer debe mejorar para la búsqueda de la igualdad y de su papel en aquella sociedad, pero también debemos entender que no es lo mismo los países con una visión extremista de su religión y los moderados. Sin duda, mejor que yo, un experto en la materia.
Yo no trago con nada, VOTO lo que considero y la monarquía es parlamentaria y que yo sepa nunca he visto al Rey diciendo cómo tengo que pensar o qué tipo de moralidad debo seguir. Ya me gustaría que la Iglesia Católica se dedicara a lo suyo y dejara de dar lecciones de ética y moral porque ellos no son la salvaguarda de la moralidad. Ya existía antes de su fundación, por cierto, que quien haya leído algo sobre la fundación del Cristianismo ya sabe a qué me refiero.
El otro día dijeron que sí, que por fin la tierra giraba alrededor del sol. Y luego, en un despiste, comentaron que sí, que fueron unos salvajitos durante la Inquisición. La Iglesia Católica ha hecho tanto bien como mal, al menos, y para confirmarlo sólo hay que repasar cualquier libro de historia contemporánea.
Por cierto, viva la libertad individual, sí, pero ya por suerte no tenemos que levantarnos en clase para rezar un padrenuestro antes de aprender matemáticas o ir los domingos a confesar nuestros pecados porque iremos al infierno. Si al final resulta que ambos, cielo e infierno, son alegorías y un sistema muy bueno para asustar y hacer que los demás sigan unas normas. No hagas esto que vas al infierno, no hagas lo otro que te hundirás en el pecado…
Otro saludo 😀
Bueno, si nos remitimos para hablar de la religión a la constitución y sacamos artículos, también dice que todos los españoles somos iguales ante la ley (mentira), que todos tenemos derecho a una vivienda digna (mentira), y así unos cuantos más…De modo que el ejemplo de la constitución o me vale.
En ningún momento me refiero a la Iglesia desde sus comienzos, sino en la actualidad, si miramos la historia, ummm…pues sí, se cometieron muchos y grandes errores, pero no nos tocó vivir aquello, así que pensando otra vez en presente, la Iglesia como institución, te digo, que no comulgo con ella, otra cosa es que por voluntad propia y otros detalles que no vienen a cuento, pertenezco a un grupo minoritario de cristianos, que creemos en el buen hacer de distintas instituciones asociadas a la Iglesia. ¿Una pena que dependan de ella? pues no.
La biblia y sus pasajes, para mí (es una visión muy particular, es uno de los mejores libros filosóficos que existen)…fanatismo…puede ser.
Si hablo de las demás religiones, es porque hoy por hoy, osea, presente, tenemos que convivir con ellas en nuestra tierra y respetarlas por supuesto, pero que tampoco, hagan ver, que todo lo láico es lo mejor para el crecimiento humano, porque estaríamos enmascarando los valores humanos. No digo que los mejores, son los que la iglesia como institución defiende. Es una locura decir en los tiempos en los que vivimos, que no se utilice el preservativo, que no se aborte, y que dirijan tu forma de vida. Yo tampoco estoy de acuerdo con eso.
Tan sólo que desde donde yo vivo la fe, es un grupo bien amplio de personas, que nada tiene que ver con el clérigo, y que evidentemente, estamos con los tiempos, no con la Iglesia como institución porque en ésta, no creo como tal.
Es curioso saber que una gran mayoría de las familias «pudientes» de nuestro país lleva a sus hijos a colegios regentados por monjas o curas…No es mi caso. Pero si es merecedor de mención.
Afirmo que hay mucha hipocresía entre todos nosotros, uno porque creen tener la posesión de la verda y libertad en decir que la Iglesia se mete donde no la llaman y otros porque viviendo bajo sus «normas» su comportamiento difiere mucho de lo que realmente debería de ser, según sus principios.
Lo más importante, para ser persona, es respetar a los demás, vivir y hacer vivir a todos los que nos tocan encontrarnos con ellos en nuestro caminar diario un mejor camino. Respetar todo lo que de una manera u otra, nos toca vivir.
Un besazo Julitoooooooooooo O:)