CategoríaLiteratura

1
Paul Auster el santo patrón de Brooklyn
2
Café: una necesidad para escribir
3
No se puede escribir más que robando
4
Tranquilamente, Kenneth Rexroth
5
Me desordeno, amor, me desordeno

Paul Auster el santo patrón de Brooklyn

Ha fallecido Paul Auster, uno de mis autores favoritos de mi larga lista de autores favoritos. El primer libro que me impactó de él fue El país de las últimas cosas, que fue el primero que me leí. A este le siguió prácticamente toda su narrativa. Ha sido uno de los autores que, junto a Cormac McCarthy, Philip Roth o[…]

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Café: una necesidad para escribir

Balzac solía beber 50 tazas de café al día. Se despertaba a la 1 del mediodía todos los días y escribía durante siete horas. A las 8 de la tarde se tomaba una siesta de 90 minutos, luego volvía escribir de 9:30 a 4 de la madrugada. Si no fuera por el café, uno no podría escribir, es decir, uno[…]

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No se puede escribir más que robando

No se puede hacer el amor más que volando. Oliverio Girondo Y claro. Si «robó» Bob Dylan con su primer álbum de versiones, y ya sin tapujos, Picasso decía que había que robar, y David Bowie lo mismo, habrá que ponerse a ello. Lo digo como si nunca me hubiera fijado en Bodas en Tipasa, de Camus. En general, cualquier[…]

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Tranquilamente, Kenneth Rexroth

Tendido tranquilamente junto a ti, Mi mejilla contra tu firme, quieto muslo, La callada música de Boccherini Bañándonos en la quietud, Mientras el sol abandona los altos de la casa y se aleja Por el Pacífico, en calma – Tan calmado se mueve el sol sobre nosotros, Tan calmado como siempre, Tan calmados, nuestros cuerpos, agotados Por el tiempo y[…]

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Me desordeno, amor, me desordeno

Carilda Oliver Labra (Matanzas, 1924) Me desordeno, amor, me desordeno Me desordeno, amor, me desordeno cuando voy en tu boca, demorada; y casi sin por qué, casi por nada, te toco con la punta de mi seno. Te toco con la punta de mi seno y con mi soledad desamparada; y acaso sin estar enamorada me desordeno, amor, me desordeno.[…]

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