La publicidad: el enemigo en casa
La contrapublicidad es una crítica de la publicidad realizada mediante la alteración de los contenidos de sus mensajes. En inglés se conoce con el nombre de subvertising, resultado de la fusión de las palabras subvert (subvertir) y advertising (publicidad).
De este juego de palabras se entiende que la contrapublicidad consiste en subvertir, es decir, trastornar, revolver y destruir la publicidad. La contrapublicidad se apodera de las técnicas publicitarias para invertir los significados de los mensajes comerciales.
Naomi Klein señala como causa importante de esta ola de oposición el enorme desarrollo del papel que desempeñan en nuestra cultura las empresas: nunca hemos estado tan “marcados”.
Los publicistas observan ahora con atención las maniobras del subvertising. La contrapublicidad cada vez es más profesional y goza de la ventaja de poder innovar sin temer a los posibles riesgos. Las nuevas ideas resultan atractivas para un mundo que necesita estar en constante renovación. Así, muchas campañas de las grandes marcas ya han introducido en sus mensajes las críticas que les lanzan desde la contrapublicidad, es decir, que emplean el rechazo al marketing para vender productos
Fuente: Wikipedia.
La publicidad es una herramienta cuyo objetivo es crearnos necesidades innecesarias, y excitar nuestro consumo. No existe la publicidad responsable: sólo existe la publicidad. No hay límite en la provocación: todo vale. Y, además, contamina nuestro entorno, las ciudades, estando sometidos a un bombardeo constante de datos, colores, sonidos, que hemos estado asumiendo como parte normal del paisaje urbano.
Mentiras. Cuando una compañía ofrece una tarifa y luego no la cumple, y contrata a una empresa de publicidad para crearla, ¿verifica que su publicidad es cierta? No. La ecopublicidad no existe. Ni tienen autoregulación; es un humo que alguna vez llegó a la opinión pública por campañas agresivas -que atentan contra la moral establecida-.
La publicidad es uno de los cánceres de nuestra sociedad; el enemigo en casa. ¿Alguien, a estas alturas de la película, la considera inocua? NO a la contaminación publicitaria en las ciudades. 😀
Fotos: Adbusters.org.
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Julio muy bueno, estoy de acuerdo contigo, fuera la publicidad, has detallado muy bien, ¿que me dices de la publicidad subliminar?. Un abrazo amigo. :-*
.-= Último artículo del blog de Uruguayita… Feliz Dia De Blog Day =-.
@Uruguayita: de la subliminal, te comento que es famosa la anécdota de la Coca Cola insertando fotogramas invisibles a simple vista, pero que nuestro cerebro asimilaba, y la gente salía del cine queriendo tomarse una. Hasta que lo prohibieron, claro, hubo mucha gente que lo hacía. Hoy pagas porque aparezca la Coca Cola en la mano del protagonista de la película. Tampoco ha cambiado tanto, pero de tan sutiles que quieren ser, se pasan de listos. 😀
@Mery: No es tan fácil decir no, pero no sólo me refiero a hacer caso a sus ofertas, sino a debatir en comunidad con los amigos, etc., en un momento dado, del malestar de la contaminación visual que hay en las ciudades. Esta idea, extendida, aboga por más espacios verdes, menos vallas publicitarias, y más armonía en la ciudad. Y luego cada uno es grandito para saber lo que consume o deja de consumir. 😀
@Pili: sí, no sólo no envejecer, sino también triunfar siendo joven -si trunfas con 50 años, se ve que eres un fracasado-, y muchas cosas más. Lo de las operaciones de cirugía estética me supera; un arreglito lo puedo entender, pero la obsesión no. Dentro de 10 años vas a estar más tremenda que ahora, recuerda estas palabras, que te las dirán, pero yo fui el primero jajaja… 😀
@Angel: nadie se la cree, está claro, por eso me (nos) parto (partimos) de la risa. Esto es una actividad empresarial como otra cualquiera y el fin es ganar dinero y necesitan a las empresas tanto como las empresas a ella. Círculo vicioso. Ya verás como no viene ningún publicista a decirnos los bienes sociales de la publicidad responsable, porque necesitaría… otra campaña para hacérnoslo creer. 😀
No es tan facil decir no a la publicidad, porque desde que nos levantamos, estamos pensando en las marcas que ofrecen los publicistas, miramos los anuncios de la tele, y siempre aunque no lo queramos, hacemos caso a algua publicidad, de hecho, tenemos nuestras marcas favoritas, ya sea de cafe, o de colonia, o lo que sea, aunque digan esto o lo otro, es cierto lo quecdices, pero no es tan facil hacer caso omiso, un saludo y feliz blogday. 😉
.-= Último artículo del blog de mery… Ojos que Hablan….Ojos que Gritan =-.
Yo creo que de alguna manera nos tienen lavado el cerebro..porque quieras o no, nacimos con ella y moriremos con ella tambien, y ¿que me dices con la obsesion que tiene la sociedad con no envejecer? esa es otra consecuencia que a provocado toda la publicidad de mujeres y hombres perfectos que en realidad no existen,y nos tienen tan comida la «sesera»; yo de verdad me doy cuenta de todo esto, al igual que todo el mundo,¿pero huir de un enemigo que nos tiene rodeados por todas partes, e incluso en nuestra propia casa, como bien has dicho? Es complicado…incluso diria imposible..es una pena la verdad.
Un besazo!
.-= Último artículo del blog de pili»cuchillita»… TRES COSAS =-.
que gusto leer un poco de crema pa’l pelo a la absurda campaña de publicidad sobre publicidad autoregulada.
¿hay algo más inconexo? ¿alguien se cree esa absurda patraña de publicidad responsable?
personalmente me parece una campaña que viene a decir algo así como:
¡socorro! estamos acojonados porque la publicidad cada vez es más transparente (y por lo tanto, ineficaz). transparente de pasar desapercibida (nada que ver con la claridad y la honestidad).